McNeill’s Weblog

Para variar, McLuhan habla de “la inversión de un medio recalentado” de una manera muy abstracta en este capítulo; solo hacía el final del capítulo concreta mejor su idea. En si, lo que explica McLuhan es que el medio, al excluir demasiado al público, sufre de un sobrecalentamiento, hay sobre información, es explosivo. Al medio no le queda de otra, más que incluir al público y hacer que se sienta más participativo, el medio es implosivo. A este proceso lo denomina “la inversión de un medio recalentado”.

En el resto del capítulo nos da situaciones para entender mejor lo que nos quiere decir con “la inversión de un medio recalentado” y sus efectos. La parte difícil es lograr conectar estas situaciones con el titulo y uno cree que va a entender mejor la idea y acaba en un enredo mental.

La analogía que mas me ayudo a entender el capitulo, y a la vez no, fue la del niño ruso y su poema sobre cuando orbitó por primera vez el Sputnik. Asocié las palabras de Yeats[1] con las del niño[2] y dio lo siguiente: “Porque descubrimos lo invisible nos olvidamos de la realidad que nos entorna”. Con la evolución de la tecnología el ser humano descubre lo que alguna vez fue invisible. Al descubrir lo que alguna vez solo soñábamos con descubrir, el hombre se olvida de lo simple, se bombardea de información de estos mundos invisibles y se olvida de la realidad de lo que ve. Somos absorbidos por la tecnología y sus avances, y nos olvidamos de lo que somos capaces de hacer en el mundo físico. Se crea este recalentamiento de información de lo invisible y se invierte la realidad; se convierte en ficción.

Según McLuhan la sobrepoblación en si no es lo que nos preocupa, sino, mas bien, la proximidad que requerimos debido a una dependencia electrónica. La electricidad debería de descentralizar pero el ser humano se ha encargado de centralizar. En lugar de que la electricidad nos una a todos, hace todo lo contrario, nos dispersa; aunque la electricidad no es a quien hay que culpar, sino al ser humano. Con la tecnología nos podemos encargar de todos nuestros asuntos en la comodidad de nuestra casa ya no interactuamos directamente sino por correspondencia. Hemos perdido el “toque humano”.

Por lo que entendí de lo que quiere decir McLuhan con medios fríos o calientes es que; un medio caliente, de alta definición, ofrece una vasta cantidad de información ya séase usando solo un canal o varios canales, o canales combinados. El medio caliente engendra poca participación del público hasta el punto de excluirlo totalmente por la cantidad de información que ofrece este medio, hay poco que completar. El medio frío, de baja definición, es carente de información, lo que engendra una alta participación del público, se busca completar la información, el público es incluido y/o se siente incluido.

McLuhan compara varios medios para mostrar el contraste entre un medio caliente y otro frío. Lo que no da a entender, y que yo creo que es bastante importante, que quizá no lo incluye porque no lo piensa de esta forma es que; un medio frío (teléfono) con su contraparte caliente (radio) podría volverse a su vez caliente a comparación de un medio más frío que este (celular). Conforme se van inventando más tecnologías se están enfriando los medios, privándonos de información o hasta el punto de deformar la información.

Si el público fuera bombardeado con puro medio caliente habría un exceso de información y causaría un colapso nervioso; y en un mundo de pura información fría, el público se vería atontado por la falta de información, viviendo una vida apática sin sentido y total ignorancia. Hoy en día, la gente esta tan acostumbrada a los medios fríos, sobre todo la televisión, que al recibir información de parte de un medio caliente tiene que reducirla a un estado frío para así poder asimilar la información.

Los medios fríos y calientes se complementan, se podría decir que es el efecto que dan los medios, afectan como actuamos y enfrentamos un medio. Son como sinónimos, significan lo mismo pero su presentación cambia, uno incluye al público, el otro no, pero a fin de cuentas sigue siendo un medio.

Comunicación: es la manera en que se comparten, o crean, ideas y sentimientos para una interacción, ya sea de dos o más participantes. La comunicación se divide en varios elementos: participantes, contextos, mensajes, canales, ruido y retroalimentación.

Participantes: estos son los individuos que participan en una conversación, uno es el emisor y el otro es el receptor, puede haber varios receptores como puede haber varios emisores. El emisor, o transmisor, transmite un mensaje usando un código, o símbolos, para hacerlo llegar al receptor que decodifica este mensaje para así poder entender el mensaje.

Contextos: son los escenarios, o ambientes, que se deben tomar en cuenta para que el proceso de comunicación sea exitoso en el momento que sucede, de otro modo afectaría el contenido de la conversación.

Contexto físico: es la ubicación del acto comunicativo y se consideran factores como: condiciones ambientales (clima, iluminación, cantidad de ruido, etc.), la hora, distancia y distribución del emisor y del receptor (ya sean pocos o varios).

Contexto social: es la relación que existe, o no, entre los individuos que participan en la conversación, podrían ser: amigos, familia, conocidos, novios, desconocidos, enemigos, etc. Esto influye en la manera que se comunican los individuos de manera que a un familiar se le habla de diferente manera que a un amigo, quizá uno comparte y entiende mejor el mensaje que el otro.

Contexto histórico: en este contexto se consideran los antecedentes de los que estén incluidos en la platica para entender la situación actual; ya sea que se este resumiendo una conversación previa o que por los antecedentes de algún participante haya un tema tabú, etc.

Contexto Psicológico: es el humor en el que están y que aportan cada uno de los participantes de la comunicación. Dependiendo del estado de ánimo de cada persona la conversación puede tomar un giro negativo, positivo, o engendrar diferentes reacciones al mensaje.

Contexto cultural: quizá sea el contexto más importante, porque es en donde se toma en cuenta las creencias, las supersticiones, los valores, las actitudes, las conductas, las tradiciones, los significados, la religión, las diferentes nociones del tiempo (calendarios, hora, etc.), las jerarquías sociales (presidentes, reyes, etc.), política (democracia, socialismo, etc.), etnias, etc. Ignorar esto es un gran error para cualquier comunicador ya que podría resultar en la ofensa de uno o varios individuos, hasta de una nación entera.

Mensajes: es lo que el emisor transmite al receptor, ya sea de manera verbal (el habla) o no verbal (música, señales, símbolos, escritura, etc.). Su proceso se divide en: significado, símbolos, codificación, decodificación, y su forma u organización.

Significado: la combinación de ideas, sentimientos y emociones en la mente del emisor, es lo que se quiere transmitir y para poder hacerlo se debe convertir en un mensaje para poder ser interpretados por el receptor.

Símbolos: son palabras, sonidos, acciones, señas que son reconocidas por el receptor como un significado.

Codificación: es el símbolo que se le asigna a cada idea, emoción o sentimiento para formar el significado.

Decodificación: es la fragmentación del mensaje para poder interpretar los símbolos y así llegar al significado.

Forma u organización: cuando el significado es difícil de interpretar o tiene una cierta complejidad es necesario organizarlo de una manera que facilite su comprensión. Se le da una estructura al significado que permita un mejor seguimiento a lo que se quiere transmitir.

Canales: se basan en los cinco sentidos del ser humano, es el modo con el cual se trasmite un mensaje con sonido (el oído), con luz (la vista), etc. Se entiende mejor un mensaje si se usan varios canales. Por ejemplo: si se combina la radio (audio) y un espectacular (visión), se crea la televisión (audiovisual).

Ruido: son los agentes exteriores, internos y semánticos que interfieren con la transmisión del mensaje.

Ruidos externos (cuando no se respeta el contexto físico): son miradas, sonidos, y otros agentes del ambiente que distraen de la acción en curso del emisor y/o del receptor.

Ruidos internos: son los pensamientos, sentimientos, emociones que distraen de la acción en curso del emisor y/o del receptor.

Ruidos semánticos (cuando no se respeta el contexto cultural): acciones, símbolos, comportamientos que distraen de la acción en curso del emisor y/o del receptor.

Retroalimentación (feedback): es la reacción, respuesta del receptor, permite determinar si el mensaje fue exitosamente transmitido y entendido. También es la respuesta al mensaje de parte del receptor que se vuelve entonces el emisor.

El proceso de comunicación: En los participantes hay un emisor y un receptor, el receptor tiene una idea (significado) que quiere hacer llegar al receptor. Para lograr esto, el emisor debe tomar en cuenta los factores externos e internos a la conversación (ruido, contextos), luego llega el momento de preparar el mensaje. Primero debe ubicar cual es su idea (significado), luego por medio de símbolos codificar esta idea y organizarla en un orden comprensible para el receptor. Por fin, para transmitir el mensaje debe escoger uno o varios canales para que éste llegue a su destinatario (receptor). El receptor, al recibir el mensaje, debe decodificar la información para llegar a la idea del emisor. Al final de este proceso el receptor reacciona a la idea (retroalimentación).

En este capítulo del libro “Comprender los medios de comunicación” Marshall McLuhan explica el significado de su expresión “el medio es el mensaje” por medio de varias definiciones propias y una serie de varias analogías que tienden a incitar al lector a leer  una misma frase, párrafo, o hasta el capitulo entero varias veces para lograr entender lo que significa “el medio es el mensaje”.

En el primer ejemplo que da McLuhan se explica como la automatización o maquinaria (modo) causa una reacción (feedback), que es una mayor implicación del hombre en el trabajo debido a una acción (mensaje), que es el uso que se le dio a la máquina que causo una eliminación de puestos de trabajo. Se entiende de este pasaje que el uso que se le de al medio crea el mensaje, entonces el mensaje reside en el medio.

Más adelante se hace referencia al general David Sarnoff, que con una citación de éste McLuhan explica que la manera en que se emplea el medio se determina el valor del mensaje, que nada es bueno o malo sino que la manera en la que se usa lo determina, tal va la expresión “armas no matan gente, gente mata gente”, se entiende por esto que las armas (modo) por si solas no matan, necesitan de una persona opere el arma para que esta persona cree la acción de matar, el mensaje de matar. Sarnoff, irónicamente, declaro que la imprenta pone en circulación mucha basura, pero no tomo en cuenta lo que el mismo había dicho previamente, quizá la imprenta permitió la circulación de esta basura (uso malo), pero también permitió la diseminación de grandes obras literarias, de cultura, de tradiciones, etc. McLuhan termina esta analogía diciendo que la tecnología puede simplemente añadirse a lo que ya somos, para hacernos mejores.

McLuhan le da mucho énfasis a la tecnología y al cambio; la sociedad se alimenta del cambio, necesita nueva tecnología para poder avanzar, lo mecánico es el futuro, en lugar de pensar el porque de las cosas se empieza a actuar, a actuar mecánicamente.

“Cuando la vida te da limones, haz limonada” (…y véndela!)

Entre más avances tecnológicos y más velocidad, más se vuelve “el medio es el mensaje”. Cuando se combinó la velocidad de la luz eléctrica (espectaculares) y la velocidad del sonido (radio), se dio lugar al cine o, en un futuro: la televisión.

Por fin, entra el gran dilema del contexto social y el  contenido, de tal manera que si no se tomara en cuenta ninguno de estos dos aspectos existe la posibilidad de que lo medios puedan destruirse entre ellos, al igual que pueden destruir al hombre. Por ejemplo, esta lo que dice McLuhan sobre las diferencias entre Inglaterra, que sigue siendo un país muy tradicional, y los Estados Unidos que tuvo poca o ninguna monarquía. El medio no puede ser empleado de la misma manera en los dos países, al igual que el sentido o valor del mensaje debe diferir.

Toda la vida, desde que tengo memoria, y por lo que me han dicho, he sido influenciado por la música, y lógicamente mis sueños y expectaciones han sido enfocados hacia esta. Recuerdo haber comprado mi primer disco a los diez años (me habían forzado a entrar a clases de piano en ese entonces), y al escuchar este disco supe en ese instante que quería aprender a tocar todos los instrumentos de aquel sensacional álbum de punk rock; lamentablemente no había tal cosa como piano en canciones del genero. Aún así seguí estudiando piano y al mismo tiempo aprendía autodidácticamente a tocar la guitarra. Así es que me inicie en el mundo de la música y me hacia ya la idea de que iba a ser un gran músico reconocido por sus habilidades en composición y ejecución del instrumento que fuera, con que tuviera que ver con los géneros musicales de mi agrado.

Por supuesto he tenido mas aspiraciones que las de ser una “estrella de rock”, este siendo mi mayor sueño. En el kinder y a principios de primaria quería ser piloto de avión por todas las historias que me contaba mi padre de sus múltiples viajes a través del mundo y aún ahora pienso que sería sensacional poder viajar tan seguido y visitar tantos países. En primaria y en secundaria, mientras muchos se preocupaban por tener su primera novia o primer novio, yo estaba muy metido en la idea de que no tenía porque preocuparme por mi futuro y no pensaba ser nada de “grande”, quería una vida simple y feliz haciendo lo que sea que hace la gente que lleva una vida simple y feliz. Es mas tarde, en la preparatoria, que me di cuenta de que si quiero una vida simple debo hacer lo que a mi me agrade, y me cayo el veinte, debo crear una banda, y eso hice. Ya llevo cinco años con la misma banda, no ganamos dinero ni tocamos muy seguido en vivo, pero aunque sea me mantiene feliz y me hace circular mas fácil por todas las situaciones que me presenta la vida; como estudiar, trabajar, personas que me desagradan, muerte, etc…

Realmente no me acuerdo mucho de mis sueños de infancia porque nunca he tenido la mentalidad de pensar en mi futuro, sino más bien vivo por el momento, por más cliché que suene. Mi vida siempre estando llena de cambios, yendo de país en país, de estado en estado, de escuela en escuela; he tenido que adaptar mis sueños a cada lugar al que voy y se me ha hecho más sencillo simplemente de no pensar en lo que me va a suceder mañana sino en lo que puedo hacer en el momento con lo que tengo en donde sea que este.

En si, mi gran constante en la vida, mi gran sueño, ha sido y es vivir por la música.